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Por el Derecho de cada niña, niño y adolescente a cumplir sus sueños; todos y todas somos corresponsables de la prevención de su reclutamiento, uso y utilización en contextos de conflicto armado.

Redactado por: Jesús Portillo B.

En la Corporación Cidemos levantamos nuestra voz por la prevención del reclutamiento de Niños, Niñas y Adolescentes (NNA) en el marco del conflicto armado del país. Este delito constituye una grave violación a los derechos de la niñez y la adolescencia, afectando de manera significativa sus proyectos de vida y su bienestar integral.

¿Qué es el Día de las Manos Rojas y porqué se conmemora?

El Día de las Manos Rojas es la campaña en la que organizaciones del estado civil, gobierno, lideres y lideresas se unen para conmemorar el aniversario del protocolo de la Convención sobre los Derechos del Niño aprobada en 1989, que, entre otras cosas, prohíbe el reclutamiento, uso y utilización de niños, niñas y adolescentes en los conflictos armados. Esta conmemoración se desarrolla desde el año 2002 y busca sensibilizar a las personas sobre la vulneración de derechos que sufren los niños, niñas y adolescentes que viven en estos contextos. Es una forma de recordar que los derechos de los niños, niñas y adolescentes deben recibir una protección integral tanto del Estado, como de su familia y la sociedad.

¿Cuándo y cómo se conmemora?

El Día de las Manos Rojas se conmemora cada 12 de febrero, fecha en la cual se implementan acciones que toman símbolo la “mano roja” que representa la señal de ¡alto! con el fin de detener la vinculación de niños, niñas y jóvenes al conflicto armado en Colombia. Durante este día se desarrollan acciones de movilización en las que se comparten mensajes claves de promoción y protección de derechos a través de conversatorios, talleres artísticos, actos simbólicos y fotografías, entre otras.

Nuestra declaración y compromiso

Según datos de la Unidad de Víctimas (UARIV) hasta el 1 de octubre de 2023, 3’707.111 niñas, niños y adolescentes han sido incluidas en el Registro Único de Víctimas (RUV) como víctimas del conflicto armado, de las cuales al 1 de abril de 2023, se habían registrado 9.457 víctimas únicas de vinculación de niños, niñas y adolescentes a grupos al margen de la ley. Estas cifras son alarmantes y podrían ser aún mayores, pues en la mayoría de los casos los NNA no se encuentran registrados.

Como organización de la sociedad civil y entidad no gubernamental, presente en 9 departamentos del país, manifestamos nuestro compromiso con las acciones de promoción y protección de los derechos de todas las niñas, niños y adolescentes, sin importar su lugar de nacimiento, su edad, género, lengua, religión o pertenencia étnica.

La responsabilidad de las organizaciones de carácter humanitario y/o social, trasciende a la implementación de programas y proyectos. Reconocemos que nuestra presencia en cada departamento, municipio, corregimiento y vereda debe generar los espacios de diálogo necesarios para que conjuntamente, familia y comunidad, podamos conocer y prevenir los riesgos a los que se ven expuestos(as) los niños, niñas y adolescentes en contextos de conflicto armado.

Asimismo, reconocemos los valiosos esfuerzos de líderes y lideresas comunitarias (adultos(as) y adolescentes) quienes desarrollan iniciativas locales basadas en la protección de diversos proyectos de vida desde los escenarios artísticos, culturales y deportivos. Gracias a sus acciones, los entornos protectores de niños, niñas y adolescentes se fortalecen, promoviendo el reconocimiento de sus habilidades y vocaciones como herramientas claves para su desarrollo integral.

En el marco de esta conmemoración del Día de las Manos Rojas, cada 12 de febrero nos ocuparemos de respondernos esta pregunta:

¿Cómo prevenir el reclutamiento, uso y utilización de niñas, niños y adolescentes?

Desde la experiencia de CIDEMOS, no existe una única respuesta, sin embargo, declaramos estas claves para que cuando familia, escuela, comunidad y Estado nos encontremos, miremos hacia un mismo horizonte.

 

  • Reconocer que los niños y las niñas son sujetos de derechos y actores clave en las comunidades. Su voz es fundamental y debemos garantizar su participación activa en todos los ámbitos de la sociedad, junto a ello, es importante considerar que el Estado Colombiano es el principal garante de salvaguardar los derechos de los NNA mediante el cumplimiento de la Política de Prevención del Reclutamiento, Uso y Utilización de Niños, Niñas y Adolescentes en el marco del conflicto armado.  Es crucial que, desde cada uno de los contextos (rural o urbano), las personas puedan generar acciones de prevención en contra del reclutamiento de NNA desde un enfoque de promoción y protección de los derechos de ellos y ellas.
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  • Generar procesos de prevención temprana a mediano plazo donde se promueva la transformación de creencias, actitudes y comportamientos perjudiciales para su salvaguarda a nivel familiar, comunitario e institucional. Estos procesos además de prevenir todas las formas de violencia, pueden promover espacios de participación a través de iniciativas deportivas, lúdicas, culturales, sociales y pedagógicas donde los niños, niñas y adolescentes pueden sentirse protegidos(as) y valorados(as).
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  • Tomar medidas de protección a corto plazo lideradas por autoridades  de entidades públicas o indígenas presentes en los territorios. Es esencial que estas medidas se enfoquen en fortalecer las redes familiares, comunitarias e institucionales en torno a los niños, niñas y adolescentes en riesgo, asegurando su bienestar y seguridad.
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Desde la Corporación Cidemos, reiteramos nuestro compromiso en la defensa de los derechos de la infancia y la adolescencia, promoviendo acciones y espacios protectores para prevenir y erradicar el reclutamiento, violencia sexual y demás riesgos asociados al conflicto armado. Es momento de actuar de manera decidida y coordinada, promoviendo espacios hacia la construcción de un futuro digno y seguro, donde se priorice una cultura de paz y respeto por la vida.

Juntos y juntas, trabajaremos para garantizar un entorno seguro y propicio para el desarrollo integral de todos y todas las niñas, niños y adolescentes.

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